DE LA PLATA AL ORO
Los exquisitos adornos de plata labrados por Sotirio Bulgari eran muy apreciados por los turistas ingleses que iban a Roma para realizar el tradicional Grand Tour y gracias a ellos floreció el negocio. Después de la apertura de la primera tienda de Via Sistina se sucedieron otras en Via Condotti y otros destinos turísticos. Cuando se unieron al negocio los hijos de Sotirio, Giorgio y Costantino, estos intuyeron que, para crecer, la empresa familiar debía centrarse en la alta joyería, aprovechando el fructífero legado de la platería.